El inicio del curso, un desafío también para los profesores
La primera impresión
que los maestros causan a los alumnos es muy importante y puede determinar el
desarrollo del resto del año escolar.
Susana
Fernández 18.09.2016
| 05:00
Profesores de Málaga
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«Es muy importante recibir a los alumnos con cara de
ánimo» Después de 37 años en la enseñanza,Trinidad Cerón, directora del
Colegio Rosario Moreno, sabe bien el trabajo que supone el principio del
curso. «Es un periodo bastante duro porque la responsabilidad de que todo
cuadre es nuestra», dice refiriéndose a todo el equipo directivo. Pese a que
admite que este, junto al mes de junio, es el momento de más trabajo del año,
la experiencia ayuda. En cuanto al profesorado, reconoce que necesita un
periodo de adaptación tras las vacaciones porque los primeros días de
septiembre son bastante estresantes. Por otra parte, esta veterana docente
afirma que la incorporación de los alumnos se hace ahora más difícil que antes
porque a los niños les cuesta más trabajo volver. «Antes había menos
oportunidades de ocio en verano y tenían más ganas de regresar al colegio», explica.
Por eso, es fundamental la forma en que los profesores los reciben. «Para los
niños es muy importante ver una sonrisa, una cara de ánimo» por parte del
maestro, detalla. Y subraya que hay que ser cercanos, «darles seguridad, pero
no la confianza del colegueo». Lograr una buena comunicación es una de las
claves que ayudará a trabajar con unos alumnos que, según Cerón, son hoy menos
maduros y poco autónomos, al mismo tiempo que hay un gran nivel de exigencia y
miedo a la frustración.
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«Empiezo contándoles un cuento para empatizar con
ellos» Llegar a un nuevo colegio genera incertidumbre y nervios, aunque ya se
tenga experiencia en la enseñanza. Es el caso de Francisco Vera, que
este curso se ha estrenado en el CEIP José María Hinojosa. «Es casi como
empezar de cero», explica para relatar a continuación cómo es su primer cara a
cara con los alumnos. «Empiezo contándoles un cuento sobre la responsabilidad y
el esfuerzo. Así empatizas más con ellos. Además, entre todo vamos elaborando
las normas», cuenta. ¿Lo más difícil del principio de curso? Para este joven
profesor sin duda es captar la atención de los niños. «Lo más complicado para
ellos es centrarse, ya que vienen de una dinámica totalmente diferente [las
vacaciones]. Por eso, yo planteo los primeros días de forma que los alumnos se
impliquen», afirma. Vera tiene claro que la primera impresión es muy importante
y su objetivo es empatizar con la clase. «Que me vean como un referente, pero
no de ordeno y mando», dice y añade que, no obstante, hay que tener muy claro
el equilibrio entre generar empatía y que las pautas queden claras desde el
principio. Reconoce que septiembre, junto a junio y la semana en que se
realizan las pruebas Escala son los periodos más estresantes. Empezar con
ilusión, como en su caso, es una buena receta.
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